La Inteligencia Artificial lleva meses en las portadas de los medios de comunicación, no sólo por sus avances, sino también por las implicaciones éticas que conlleva y por la necesidad de regulación de la misma. Hoy en día se está generalizando su uso y cualquier persona con una conexión a Internet puede acceder a la IA para generar textos, crear imágenes e incluso planificar las vacaciones.
La IA también está desempeñando un papel importante en la industria de la automoción, donde está ayudando a avanzar en temas como la conducción autónoma, la seguridad vial y la experiencia de usuario. En este post vamos a ver algunas de estas aplicaciones:
Conducción autónoma
La IA está teniendo un papel fundamental en el desarrollo de los vehículos autónomos, que utilizan sus algoritmos para procesar datos provenientes de cámaras, radares y otros dispositivos para tomar decisiones en tiempo real. Estos sistemas pueden reconocer objetos, seguir el carril de forma adecuado e interpretar las señales de tráfico. De hecho, se está utilizando la IA para entrenar a los coches autónomos, como se señala en este artículo de MIT Technology Review.
Asistencia al conductor
Se está utilizando la inteligencia artificial para mejorar la seguridad y la comodidad durante la conducción. Esto es posible debido a que se está integrando la IA en los sistemas de asistencia al conductor, como los de frenado de emergencia, los sistemas para mantener el vehículo en su carril o en los sistemas de detección de fatiga.
Dashcams con IA
También las dashcams o cámaras de salpicadero están empezando a utilizar la IA para ofrecer nuevas funciones y mejorar la seguridad en carretera. Es el caso de la CAM 50, que hace uso de la IA para detectar comportamientos de riesgo por parte del conductor, como puede ser el uso del móvil durante la conducción o señales de fatiga. Esta cámara alerta al conductor si detecta cualquier comportamiento de riesgo, con el fin de evitar posibles accidentes.
Mantenimiento predictivo
La IA también se está aplicando en sistemas de mantenimiento predictivo. Utilizando sensores y análisis de datos, los vehículos pueden monitorizar el estado de los componentes y predecir posibles fallos, problemas o errores. Esto permite programar el mantenimiento de manera más eficiente y reducir el riesgo de averías graves.
Optimización de rutas y tráfico en tiempo real
Los sistemas de navegación basados en IA pueden analizar datos de tráfico en tiempo real y proporcionar rutas óptimas para evitar atascos. Además, la IA puede ayudar a gestionar el flujo de tráfico en áreas urbanas y optimizar la coordinación de semáforos, mejorando así la eficiencia y la movilidad en las ciudades.
Reconocimiento de voz para mejorar la seguridad
Ya hay vehículos que utilizan sistemas de reconocimiento de voz impulsados por IA. Estos sistemas permiten a los conductores controlar diversas funciones del vehículo, como la navegación, la reproducción de música o la respuesta a mensajes de texto, a través de comandos de voz, lo que mejora la seguridad y la experiencia del usuario.
Experiencia de usuario mejorada
Además, la Inteligencia Artificial permite analizar los patrones y preferencias del conductor para adaptar la configuración del vehículo, como la posición del asiento, los ajustes de clima y las preferencias de entretenimiento, a las necesidades individuales de cada persona. Algunas marcas incluso van más allá, como Mercedes, que ha anunciado un programa piloto para incorporar Chat GPT en los sistemas multimedia de sus vehículos.
Estos son algunos ejemplos de la aplicación de la IA en los vehículos. A medida que avanza la tecnología, iremos viendo más desarrollos y aplicaciones en el campo de la automoción, con el fin de obtener una movilidad más segura, eficiente y ecológica.