Mantener los vehículos en condiciones óptimas proporciona numerosos beneficios y resulta esencial para el cumplimiento de las normas de seguridad en gestión de flotas de transporte. Sin embargo, no suele haber un control o una bitácora de mantenimiento vehicular estandarizado.
Hoy los mantenimientos son más importantes que nunca, ya que enfrentamos un escenario de mercado con bajo stock, que hace que tener en buen estado los vehículos de la flota resulte crítico. Este es un hecho reconocido por las marcas y por la Asociación Nacional Automotriz de Chile (ANAC A.G.)
Además, según el sitio conduccióneficiente.cl, dependiente de la Agencia de Sostenibilidad Energética, tener un vehículo en buenas condiciones puede hacerlo hasta un 10% más eficiente en lo que a consumo de combustible se refiere.
Otros estudios sugieren que el deterioro de las flotas no solo implica un problema a nivel de costos logísticos o gastos de mantenimiento (básicos o incluso mayores) que los mismos operadores y conductores de transportes en ocasiones se ven obligados asumir, sino también impactos a nivel ambiental.
Por lo tanto, no considerar la buena práctica de mantenimiento deriva en lo siguiente:
- Procesos de mantenimiento vehicular ineficientes
La programación no coordinada, el poco control, la falta de un calendario de mantenimiento preventivo vehicular o las revisiones inconsistentes de los vehículos a nivel técnico (como frenos, amortiguadores, neumáticos y otros aspectos relevantes) aumentan directamente la probabilidad de que se produzcan costosos tiempos de inactividad, así como un mayor gasto en el mantenimiento de los vehículos en el futuro.
- Conductas inadecuadas e inseguras de conducción
Algunos hábitos de conducción, tales como frenar bruscamente o acelerar innecesariamente, provocan un inminente desgaste en los vehículos que, al acumularse, genera un mayor corto en su reparación.
Algunas conductas que pueden reducir la vida útil del vehículo suelen ser sutiles:
Utilizar los frenos al bajar pendientes (y no enganchar).
Acelerar hasta el fondo en velocidades altas.
Sobrecargar el vehículo.
Cambiar a reversa con el vehículo en movimiento.
Acelerar el motor antes de arrancar.
Muchas veces será importante capacitar a los operadores, realizar campañas de concientización e, incluso, contar con tecnología o software de gestión que permita, no solo analizar todos los movimientos, sino también corregir los estilos de conducción.
- Detección tardía de daños del vehículo
Incluso si se programan controles de mantenimiento automotriz de forma regular, a menos que se detecten los problemas tan pronto como surjan, existe el riesgo de que las pequeñas fallas se conviertan en problemas mayores que requieren costosas reparaciones.
De ahí la importancia de un mantenimiento preventivo de flotas que implique desarrollar una gestión eficaz para así obtener mejores rendimientos y una uso óptimo del presupuesto en este ítem.
Un plan de mantenimiento adecuado debe responder a estas preguntas:
¿Qué partes deben revisarse?
¿Cuál es la vida útil de cada una de estas piezas?
¿Qué metodología se debe implementar para optimizar la vida útil de cada vehículo?
¿Cuál es la periodicidad y frecuencia con la que se realizan las acciones pertinentes?
Con base en eso, podemos hablar de un plan de acción para la gestión efectiva de las flotas en el aspecto técnico.
- Vida útil del neumático
¿Sabías que la vida útil de un neumático de buena calidad es de alrededor de 40.000/50.000 km?
La prolongación de la vida útil de estos elementos contribuirá a reducir el gasto total.
Por ejemplo, la utilización de sistemas de monitoreo o rastreo vehicular o, en su defecto, el apoyo de un calendario de mantenimiento preventivo pueden ayudar a ello. De esta forma se puede conocer la presión de los neumáticos, algo muy importante, ya que una incorrecta calibración puede aumentar hasta un 10% el consumo de combustible.
Conclusión:
Es fundamental no omitir ni pasar por alto algunos de los aspectos mencionados, ya que pueden influir en la forma de gestionar cada vehículo. Al aplicar estos consejos, es muy probable que se logre aumentar el rendimiento de la flota, así como obtener una reducción de costos tanto logísticos como ambientales.